Iluminación exterior

A la hora de elegir la iluminación para jardín debemos de seguir unos criterios básicos como son la funcionalidad, la estética y la seguridad.

La funcionalidad se refiere a cómo las lámparas instaladas en el exterior mejoran el uso de cada espacio. No es lo mismo colocar balizas de jardín para iluminar un camino que optar por una iluminación decorativa para una terraza donde descansaremos o cenaremos.

En las terrazas valoraremos crear un clima cálido y acogedor con diseños más elegantes y tonos de luces más cálidos, el uso de lámparas portátiles diseñadas para exterior ofrece versatilidad y funcionalidad ya que podemos colocarlas en zonas donde no dispongamos de un punto de luz cerca.

Para iluminar las zonas de paso, es ideal instalar balizas de exterior. Estas deben estar diseñadas para resistir golpes y choques, asegurando tanto su durabilidad como su funcionalidad. Optar por modelos resistentes y bien ubicados garantizará una iluminación efectiva y segura en áreas transitadas.

Por último, los materiales reciclados y sostenibles ofrecen a los fabricantes la posibilidad de experimentar con formas innovadoras y llamativas, perfectas para ambientes modernos. En contraste, para decoraciones de estilo más clásico, los acabados como la forja, el bronce y el óxido aportan un toque elegante y atemporal.

La seguridad viene indicada por varios factores, el grado de protección IP es uno de los más importantes, ya que nos indica la protección de la luminaria frente agentes ambientales como el polvo o la lluvia.

Las luminarias utilizadas en el exterior de casa, como jardines, patios, fachadas o estacionamientos, están expuestas a la intemperie y a condiciones climáticas adversas. Estos entornos requieren una alta protección IP para resistir la lluvia, el polvo y otros elementos ambientales.

Los grados de protección más comunes son: IP54, con protección frente al polvo y la lluvia; IP65, con protección total contra el polvo y chorros de agua; e IP67, con protección total contra el polvo y capacidad de inmersión temporal en agua hasta 1 metro de profundidad durante un tiempo limitado.

Si quieres más información sobre los tipos de protección IP, puedes consultar este enlace.